Tras unos días buscando trabajo ayer tuve una entrevista. En plan 2.0, por Skype, cosa que aún no había hecho. La empresa era una consultora de recursos humanos (y hasta aquí puedo leer). Lo que me ofrecían era un puesto como consultora buscando perfiles con idiomas en un ambiente joven, internacional y dinámico, con tareas interesantes y muchas posibilidades de aprender. 40 horas a la semana, de lunes a viernes, con una tarde libre. Con formación a cargo de la empresa. Con contrato de un año. Hasta aquí todo en orden. ¿Cuál es el gato encerrado, pues? Tacháaaaaaan: son prácticas. El sueldo, 500 euros netos.
Ayer iba a escribir un post sobre el tema, titulándolo algo así como “dilema existencial”, pues pensé que podría ser una buena oportunidad para probar ese mundillo y cambiar un poco de aires. Quede dicho que después de la guardería, cualquier trabajo de 8 horas sentada delante de un ordenador me parece un lujo. También me entró el canguelis ése que tenemos algun@s de mi generación: “así aprenderé algo nuevo”, “no tengo experiencia previa”, etc. Hoy, en cambio, lo veo todo de otro color. Se acabó.
Se acabó el seguir en esta rueda sin fin de formaciones, prácticas, sueldos de mierda y sobrecualificación. Se acabó pensar que no tengo la experiencia o formación suficientes. Se acabó la titulitis. Se acabó contribuir a que empresas se expandan y que sus dueños se forren a base de aprovecharse de la gente, coño. Tal y como me explicaron, de un equipo de unas 15 personas, la mitad son becari@s, y encima se vanaglorian de que siendo becaria vas a tener el mismo trato y las mismas responsabilidades que las otras personas. Es decir, saben que puedes hacer el trabajo y que estás cualificada para el puesto, pero te pagan menos que a los que tuvieron la suerte de entrar en la época de las vacas gordas o que primero pasaron por el aro como practicantes.
Quiero pensar que aún es posible encontrar algo que me guste y con lo que me sienta realizada (risas). No sé lo que quiero, pero sí sé lo que no quiero. Eso sí, si más adelante le veo las orejas al lobo, que en este caso serían rojas y con forma de números, haré mía la frase de Groucho Marx: “estos son mis principios; si no le gustan, tengo otros”. Pero de momento no quiero tirar la toalla.
Audio: Se acabó (María Jiménez)
Molt bé Sandra, por creer se empieza. Hay que valorarse y empezar de una vez a venderse bien. El principio de Groucho Marx…. es uno de mis favoritos!!!
Mari
muy bien hecho!
En primer lugar quiero desearte mucha suerte, estoy seguro de que encontrarás lo que quieres, aunque sea a base de descartar lo que no quieres 🙂
Resulta que tras un parón en mi joven blog, para leer y coger ideas nuevas, me encuentro con las típicas noticias de nuestros verdugos/políticos y sus sueldos indecentes. A veces me gusta (o no puedo reprimir) mostrar mi opinión acerca de lo que va sucediendo en este circo en el que se está convirtiendo España; así que me tocaba hacerlo y unirlo con un artículo cuando menos engañoso que leí en «El Mundo» y me dolió. Leyendo los comentarios he llegado aquí y me ha gustado leer la realidad desde el campo de batalla, que parece que siempre todo lo que hay fuera es maravilloso y cae del cielo. Así que gracias por tu aportación.
Un saludo, te sigo!
Muchas gracias! Sin duda no hay como leer los periódicos para darse cuenta de que vivimos en un circo permanente… Muy interesante tu blog! Te sigo 🙂 Saludos!
Lo que me molesta es saber que España està regalando cerebros a otros paìses!
Sin duda alguna! La situación de l@s jóvenes ahora mismo no es divertida precisamente… Y es lamentable el gasto que supone la formación para el estado y que después nos tengamos que ir. Cuando explico por aquí cómo funciona todo y cómo de sobrecualificado está todo el mundo… Simplemente flipan. Un saludo!
Hola gran Bubu,
¿Te importaría decirme qué plugin has usado exactamente para «siguiente artículo» y «artículo anterior»‘
También tengo un blog (www.applenology.com) y no he encontrado un plugin para eso que me guste tanto como el tuyo.
danke sehr!
Sandra!!!
Me alegro de que alguien tenga ovarios a decir NO a la explotación que, con la excusa de la crisis económica, nos quieren hacer tragar!
Si todos hiciéramos lo mismo otro gallo cantaría (y yo de gallos y gallinas se mucho).
Besos y hasta muy prontito…
Adolfo